Por Bruno Cortés
La abogada Ernestina Godoy compareció ante el Pleno del Senado como aspirante a encabezar la Fiscalía General de la República (FGR), donde delineó una agenda centrada en coordinación institucional, fortalecimiento de la inteligencia y atención integral a las víctimas. Frente a legisladoras y legisladores, afirmó que su proyecto responde a un mandato social y no a un reconocimiento político.
Desde el inicio de su intervención, Godoy subrayó que la procuración de justicia debe ser eficiente, científica y humana, y que el país enfrenta una criminalidad cada vez más sofisticada. Señaló que delitos como trata de personas, ciberdelincuencia, lavado de dinero y tráfico de armas requieren estrategias conjuntas, análisis de fenómenos criminales y seguimiento a las estructuras financieras de las organizaciones.
Ante un Senado que recientemente aprobó reformas al modelo de seguridad pública —incluyendo el Sistema Nacional de Investigación e Inteligencia y nuevas leyes en materia de extorsión y desaparición— la aspirante sostuvo que la FGR debe alinearse a ese entramado legal sin perder autonomía. Recalcó que la coordinación con estados, fiscalías locales, organismos de derechos humanos y comisiones de búsqueda es indispensable para abatir la impunidad.
Godoy anunció que, de ser ratificada, impulsará un rediseño institucional que priorice la investigación científica, el fortalecimiento de peritajes, el uso riguroso de la cadena de custodia y el enfoque multidisciplinario. Advirtió que la fiscalía no puede sostener acusaciones en confesiones o pruebas viciadas, sino en evidencia sólida que resista el escrutinio judicial.
En un mensaje dirigido a víctimas y colectivos, prometió una fiscalía de puertas abiertas, con un modelo de atención integral y reparación del daño, donde las personas dejen de ser “un trámite”. Asimismo, afirmó que la institución tendrá “cero tolerancia a la tortura”, y que cualquier funcionario que incurra en violaciones de derechos humanos será investigado y sancionado.
La aspirante también se refirió al combate a la corrupción interna, uno de los puntos más señalados por organizaciones civiles. Planteó que la Fiscalía de Asuntos Internos será reforzada con mecanismos de detección, investigación y sanción, y que la profesionalización del personal —incluida capacitación con perspectiva de género, análisis de contexto y nuevos modelos de litigio— será prioritaria.
Durante su discurso, Godoy afirmó que no habrá persecución política ni fabricación de culpables, pero sostuvo que tampoco habrá impunidad. Explicó que una fiscalía que intenta investigar todo, sin priorizar, termina sin resultados, por lo que propone segmentar casos según su impacto en la paz pública y la gravedad del fenómeno criminal.
En su cierre, reconoció el decálogo presentado por Movimiento Ciudadano y afirmó que lo adopta como compromiso público. Aseguró que su actuación estará guiada por la Constitución y por el principio: “al margen de la ley, nada; por encima de la ley, nadie”. Reiteró que la justicia debe convertirse en una práctica cotidiana y cercana a la ciudadanía.
La comparecencia ocurre en un momento clave para el sistema de justicia, en medio de ajustes legales y demandas sociales para mejorar el desempeño de la FGR. De obtener la mayoría en el Senado, Godoy se convertiría en la funcionaria encargada de encabezar la estrategia penal del país en coordinación con la Estrategia Nacional de Seguridad y el nuevo marco de inteligencia.
